Me lo dije

Siempre hay un momento en el que percibo que, algo que aparentemente no, va a doler. Como las agujetas después de mucho, mucho, reír o la piel quemada después de una tarde de sol y brisa de mar. Y esto se con certeza que va a doler, o al menos escocer. Pero siempre he pensado que el dolor con certeza es menos dolor… ¿O es al revés?

No hay comentarios :

Publicar un comentario